Más que un cambio de aceite: la clave del rendimiento del motor
El aceite es la sangre del motor de un camión, pero elegir el tipo adecuado es mucho más que solo seguir las recomendaciones básicas del fabricante. La viscosidad, los aditivos y la calidad del lubricante influyen en el desempeño, la vida útil del motor y el consumo de combustible.
Un aceite incorrecto puede generar mayor fricción interna, aumentar la temperatura del motor y provocar un desgaste prematuro de las piezas. En camiones que recorren miles de kilómetros bajo condiciones extremas, esta elección es fundamental.
Tipos de aceites y cuál es el ideal para tu camión
Existen tres tipos principales de aceites: minerales, sintéticos y semisintéticos. Los aceites minerales son más económicos, pero requieren cambios más frecuentes y ofrecen menor protección en climas extremos. Los sintéticos, aunque más costosos, proporcionan mayor estabilidad térmica y mejor lubricación en motores modernos.
También es importante considerar la viscosidad, indicada en las especificaciones como "15W-40" o "10W-30". Una viscosidad adecuada permite que el aceite fluya correctamente en climas fríos y mantenga su espesor en temperaturas altas.
Mantenimiento y mejores prácticas
El cambio de aceite no debe tomarse a la ligera. Usar filtros de calidad, revisar los niveles regularmente y evitar intervalos excesivos entre cambios son claves para maximizar la eficiencia del motor. Además, monitorear el estado del aceite mediante análisis de laboratorio puede prevenir problemas mayores antes de que se conviertan en fallas costosas.
Invertir en un buen aceite y seguir un mantenimiento riguroso garantiza que el motor de un camión rinda al máximo, evitando paradas inesperadas y costos innecesarios.